(Izq. a Der.) Juliana Hurtado, asesora Procuraduría delegada para Asuntos Ambientales, Agrarios y Minero Energéticos; Michael Hantke, expresidente del Tribunal Ambiental de Chile, y Juan Manuel Laverde, magistrado auxiliar del Consejo de Estado.

Para socializar respecto al papel que cumplen las universidades en la mitigación del cambio climático y cómo, desde la academia, se puede aportar al fortalecimiento de la sostenibilidad y la transformación social, el Consejo de Estado eligió a la Universidad Industrial de Santander (UIS) para la realización del conversatorio ‘El papel de la justicia ambiental frente a los retos del cambio climático’.

Invitados especiales, autoridades en la materia, presentaron experiencias que desde su labor se están realizando para aportar a la sostenibilidad ambiental, desde el ámbito de la justicia y el derecho. 

Juan Manuel Laverde, magistrado auxiliar del Consejo de Estado, hizo referencia al objetivo de este evento y al por qué eligieron a la UIS para su desarrollo. “Este evento está dentro del contexto del ‘Vigésimo noveno encuentro de la jurisdicción de lo contencioso administrativo’, que se celebra este año en Bucaramanga. Quisimos  poder compartir con la comunidad UIS los conocimientos de los conferenciantes que han sido vinculados. Consideramos que resulta dentro de una función social y una colaboración armónica con la comunidad universitaria compartir estos conocimientos sobre la sostenibilidad ambiental”.

Respecto al por qué en la UIS, precisó que “para nadie es secreto que es la principal universidad del oriente y una de las más importantes del país, y es acá donde se forman personas que tienen relación directa con el tema ambiental, ingenieros, químicos, biólogos; por ello, este mensaje de la sostenibilidad puede tener una mayor representatividad”.

La participación internacional estuvo a cargo de Michael Hantke Domas, expresidente del Tribunal Ambiental de Chile, quien contó experiencias que al respecto se vienen realizando en ese país.

“En Chile hemos tenido experiencias exitosas en términos de poder, en un solo espacio, tener gente que sabe de la materia, no solo sabe de derecho, sino también de la ciencia; eso facilita la toma de decisiones en la medida en que las ciencias confluyen para entregar justicia y paz social; entonces eso ha sido un gran avance en materia de justicia ambiental”.

Agregó que, “en Chile existen tribunales ambientales especializados con una característica importante: allí los jueces no todos son abogados, sino que científicos forman parte del panel de jueces y es una experiencia inédita en la región y queremos presentarla a la comunidad aquí en Bucaramanga”.

Juliana Hurtado Rassi, asesora de Procuraduría y delegada para Asuntos Ambientales, Agrarios y Minero Energéticos, también hizo parte del grupo de expertos invitados. En su intervención hizo énfasis en que “el cambio climático muchas veces, de manera errónea, ha sido entendido como una problemática que no nos afecta ni nos involucra desde lo individual y esto hay que entenderlo de una manera más pedagógica, el cambio climático nos afecta en el día a día y nos afecta en lo local. Hay un lema que dice: es un problema ambiental global, pero debemos actuar desde lo local. En ese sentido la academia, considero yo, tiene uno de los roles más importantes en esta materia, primero en la educación que se debe dar a todos los estudiantes, debería ser una electiva para todos los estudiantes universitarios”.

Moisés Rodrigo Mazabel, magistrado del Tribunal Administrativo de Cundinamarca, también participó en este evento que tuvo lugar en el Aula Máxima de Ingeniería Mecánica de la Universidad Industrial de Santander.