Con la exposición ´El silencio de las formas’, María Angélica Ferreira Pereira, estudiante de Artes Plásticas del programa Ipred-UIS de sexto semestre, lleva las fibras autóctonas de nuestra artesanía a la dimensión del arte y sublimación de los materiales. Esta joven artista y artesana expone su obra reciente en las salas Rafael Prada Ardila y Gustavo Gómez Ardila de la Dirección Cultural de la UIS, que estará abierta hasta el próximo 3 de diciembre.
En la sala Rafael Prada Ardila (primer piso) se encuentran “representaciones y la observación del paisaje, sin que sea paisaje, y abstracciones de paisaje elaboradas con fibras naturales, telas de algodón, hilos de algodón. Y en la sala Gustavo Gómez Ardila (segundo piso) podemos encontrar la instalación que se llama ‘Fibras’”; queremos mostrar un paisaje, sin que sea paisaje, del cultivo del fique, trabajo artesanal, también con el fique, unas formas cilíndricas elaboradas con telares circulares, donde podemos observar el uso de la fibra del fique. Encontramos las pencas, un paisaje de cultivo de fique y las hojas donde se hace el proceso del cardado para reconocer la fibra, el proceso como sale la fibra de la penca de fique”, dice María Angélica Ferreira.
Esta exposición es el fruto de más de un año de trabajo y preparación. “El silencio de las formas, primero que todo, es un trabajo de investigación, donde hay mucho trabajo en campo. En la sala Gustavo Gómez Ardila se instalan elementos, productos de carácter vegetal, que tienen que ver con la relación en el territorio y en ese territorio se hizo un trabajo de campo en Curití, se recorrieron plantaciones de fique, visitas a Ecofibras, viendo todos los procesos desde la plantación hasta el desfibrado y demás. Luego se hizo la aproximación al material. Entonces, en el arte se empieza a trabajar con la hoja, luego sigue el proceso hasta que llega al desfibrador, luego el hilado, y producto de ello son varios de los telares que vamos a ver acá. Son trabajos de ella netamente artesanales, porque su trabajo funde esa síntesis entre artesanía y arte”, señala el profesor Roger Díaz Carreño, curador de la exposición.
De otra parte, explica que “en la creación los tiempos no son los de cualquier proceso; a veces hay que darse un tiempo para que llegue esa posibilidad creativa, por eso hay mucha idea con el territorio y el paisaje; el viaje a Barranca, el viaje a Curití, viajes a Barichara y de ahí salen las formas”.
Refiriéndose al material, el maestro Roger Díaz dice que “los hilos son el elemento que contienen todas las piezas que están en la exposición, es el elemento que prima, que les da la fuerza y creo que es una constante en el trabajo de María Angélica durante diez años como artesana, y cómo esos hilos que vienen del trabajo artesanal los lleva hacia una posibilidad estética artística. Son como esa unión entre el arte y la artesanía”.
Y sobre el nombre de la exposición, ‘El silencio de las formas’, el maestro Roger Díaz explica que “nosotros podemos ver las piezas artesanales como objetos cargados de memoria, podemos ver las obras artísticas con sus características estéticas, pero nunca vemos lo que hay detrás de ello; o sea, todo el proceso, todo el conocimiento, la tradición que puede tener tanto un artesano como un artista, y también el conocimiento de esas técnicas que utiliza. Entonces, las formas no nos pueden decir eso, las formas no nos pueden indicar quién es el artista, quién es el artesano, cómo se hacen, qué hay detrás de toda la investigación, las emociones y el conocimiento que tiene cada uno de ellas. Es siempre silencioso; nosotros vemos los objetos como una experiencia estética en relación con nosotros mismos, pero muchas veces no con el artista o el artesano”.
