María Paula Acevedo Díaz, egresada del programa de Licenciatura en Música UIS y profesora de música de la Escuela de Emprendimiento de Arte y Oficios del Instituto de Cultura y Turismo de San Gil, ha recibido reconocimientos de la comunidad por encaminar a sus alumnos, los pequeños estudiantes de diferentes veredas, a conocer diversos ritmos musicales con la ayuda de artículos de cocina, a través de videos explicativos durante la época de pandemia.
Con esta iniciativa musical, la profesora convirtió las cucharas, platos, lapiceros, ollas y demás objetos en instrumentos, en beneficio de los estudiantes, quienes lograron continuar con las clases desde sus hogares.
“El enfoque de este programa es iniciación musical, a través del canto. Más allá de objetos, eran elementos prácticos que tuvieran en casa y que sirvieran de herramienta para asociar con el ritmo y conceptos básicos de la música. Entonces usábamos diversos elementos, como vasos, botellas llenas de semillas, de piedras, entre otros”, comentó María Paula.
Además, su iniciativa convirtió la red social WhatsApp en un salón de clase, donde la profesora grababa la metodología y enviaba el resultado final a sus estudiantes, quienes, una vez aprendida la lección, tenían que generar un nuevo ritmo musical, a manera de evaluación.
Durante la pandemia, la iniciativa de la docente llegó a las diferentes veredas de Versalles, San José, Altos del Encinal y Buenos Aires, del municipio de San Gil, Santander. En estas zonas rurales los niños y jóvenes supieron por primera vez lo que era un acorde, un ritmo o una melodía en medio de la cuarentena.
“A mí me gustó mucho todo lo que aprendimos durante la pandemia. La profesora nos enseñó canciones y hasta a hacer instrumentos musicales, como por ejemplo un xilófono con botellas de agua”, dijo la estudiante Camila Rodríguez.
Más de 50 niños de las veredas de San Gil siguen preparándose, y ya en sus clases presenciales han podido empezar a tocar flautas, guitarras y demás instrumentos musicales que la profe María Paula con amor y dedicación les enseña, segura de que mañana estos pequeños llevarán para ellos y para las futuras generaciones esa pasión por la música que nació en medio de una pandemia.