Conformar una red que integre a las instituciones y organizaciones que prestan un apoyo a la población migrante, refugiada y retornada en Santander fue una de las propuestas hechas durante el foro Santander territorio de integración para refugiados y desplazados, organizado por la Escuela de Derecho y Ciencia Política de la Universidad Industrial de Santander en el marco de la semana por el día Mundial del Refugiado que se conmemora todos los 20 de junio.
Durante esta jornada se conoció de las acciones desarrolladas por la Gobernación de Santander, las Personerías del área metropolitana de Bucaramanga, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar-Icbf; Aldeas Infantiles, Centro Abastos, Fundación entre dos tierras y Semillas de Ilusión, así como la Agencia de la ONU para los Refugiados –ACNUR y los Consultorios Jurídicos y Centros de Conciliación de las Universidades.
La crisis migratoria venezolana es un enorme reto para la institucionalidad colombiana. A la fecha están registrados en el Registro Único de Migrantes Venezolanos- RUMV más de 2.278.000 migrantes del vecino país. Garantizar los derechos de esa población —muchas veces marginada, estigmatizada y victimizada— ha sido un objetivo fundamental de todas las instituciones, organizaciones y entidades que se han comprometido en el apoyo de esta población, que a través del Estatuto Temporal de Protección para los Migrantes Venezolanos se ha buscado una migración conforme a los postulados de respeto y garantía de los derechos humanos, en especial de las personas migrantes, solicitantes de asilo y refugiadas en situación de movilidad humana.
Santander es la tercera región receptora de población migrante en el país, por lo que este flujo de personas ha tenido una incidencia determinante en el diario vivir, así como en los ámbitos sociales, económicos y de derechos. Todos los actores que han participado en el manejo de estas nuevas realidades tienen mucho que decir frente a las maneras y resultados de la migración en nuestro territorio.
Iván Reinel Padilla, asesor del Consultorio Jurídico y Centro de Conciliación UIS, coordinador de la línea de Atención al Migrante, señaló que «la migración es un tema que como territorio fronterizo prácticamente ha sido de gran impacto para nosotros y que necesariamente tenemos que mirar qué se ha hecho y qué falta por hacerse y de qué manera estamos dispuestos a seguir apoyando este proceso».
Durante este primer año en el que se ha desarrollado la línea de atención al migrante en el Consultorio Jurídico UIS se atendieron 150 casos con actuaciones específicas, así como 25 casos con la Unidad Móvil del Consultorio en el barrio Morrorico; igualmente se buscó acercar la comunidad al tema de migración a través de la Cátedra de Paz, así como sensibilizar para disminuir situaciones de xenofobia.
Alba Pereira, de la Fundación entre dos tierras, señaló cómo Santander ha dado pasos gigantes en el apoyo a la población migrante, mostrando lo realizado por ellos desde el año 2013 y todo lo que se logró durante la pandemia entre 2019 y 2020 al recibir a sus compatriotas y que se diera un trabajo en equipo que al principio era esfuerzos individuales.
«El trabajo que hemos logrado hacer articuladamente con la academia, las organizaciones internacionales y con otras de base comunitaria ha permitido que Santander tenga el primer puesto en trabajo positivo en la población migrante; debemos seguir trabajando de la misma manera, ha sido importantísimo el trabajo que los consultorios han hecho porque es un valor agregado para todas las organizaciones», dijo Pereira.
«El estudiante que aplica a trabajar en los consultorios sale con un plus adicional porque lleva dominado el trabajo al migrante, y el saber que podemos contar con un grupo de abogados los 365 días al año 24 horas del día permitiendo dar respuesta a las necesidades que tuvo, tiene y va a tener la población migrante y retornada es importante».
Por su parte, la Dra. Lucy Pabón, desde la Gobernación de Santander explicó las acciones emprendidas en atención a la población migrantes, refugiados y retornados, las cuales se efectuaron a través del Plan de Desarrollo Departamental, con el objetivo de atender las necesidades de este grupo de personas vulnerables y que en su metodología cuenta con mesas temáticas.
Así mismo, expuso el trabajo realizado junto a la Secretaría de Educación con el que se busca que los 9 mil niños y niñas inscritos en las instituciones de educación primaria de 82 municipios del departamento sean registrados en el sistema y así regularizar su permanencia y más adelante no enfrenten problemas para graduarse e ingresar a la educación superior.
En el caso del Icbf se presentó a los participantes lo hecho con los niños, niñas y adolescentes, así como con sus padres en la atención a su situación de migración, desplazamiento o retorno al país.
Desde Aldeas infantiles, organización que ha prestado acompañamiento a la población que se ha movilizado por las vías del territorio santandereano, se expresó que gracias al esfuerzo de las distintas entidades han encontrado una mano amiga que les ha ofrecido abrigo, alimento y asesorías para que se beneficien de los servicios y derechos establecidos en las leyes colombianas.
Este espacio académico y de pedagogía permitió tener de primera mano la información pertinente de cómo se ha desarrollado esta nueva dinámica social y económica de cómo reforzar los lazos de trabajo entre las entidades y personas que desarrollan acciones en este marco en pro de mejorar la situación de los migrantes venezolanos.