El viernes 17 de febrero del 2023, en Bogotá, se dieron cita los rectores de cuatro universidades públicas colombianas para firmar un acuerdo que llamaron Alianza por la formación integral, la ciencia y la tecnología, para un país incluyente y en paz. Se trata de una estrategia para la formación integral y el desarrollo de nuevas perspectivas de país que fue asumida por la Universidad Industrial de Santander, la Universidad Nacional de Colombia, la Universidad de Antioquia y la Universidad del Valle, instituciones reconocidas por sus apuestas para el fortalecimiento de los territorios a través de la educación superior.
El documento mediante el cual se formalizó este acuerdo, resalta que las cuatro universidades participantes se destacan por su «liderazgo, tradición y reconocimiento en los sistemas de educación superior a nivel nacional e internacional». Estas instituciones congregan actualmente a más de 100 000 estudiantes de pregrado, 20 000 de posgrado y 5000 docentes con las más altas calificaciones, la mayoría de ellos con título de doctorado. Adicionalmente, cuentan con una alta concentración de institutos y centros de investigación, tecnología e innovación del país.
Con ese precedente, la alianza firmada por los rectores Hernán Porras Díaz, de la UIS; Dolly Montoya Castaño, de la Unal; John Jairo Arboleda Céspedes, de la UdeA; y Edgar Varela Barrios, de Univalle, está enfocada a cinco ámbitos que, de acuerdo con las firmantes, requieren soluciones pertinentes e innovadoras.
En el primero de estos campos, la investigación y formación doctoral, las cuatro instituciones se proponen reforzar el desarrollo de programas de doctorado que se articulen con el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. En este sentido se promoverá la internacionalización y cooperación para compartir nuevos conocimientos y para la construcción de soluciones conjuntas ante los problemas locales y globales.
La presencia de estas cuatro instituciones en las regiones colombianas también las convoca a trabajar conjuntamente por la construcción de paz territorial. En este ámbito, la alianza firmada plantea que, con el aporte del conocimiento del más alto nivel, las instituciones se disponen para continuar gestionando iniciativas para la consolidación de la paz territorial y el encuentro comunitario, en donde se dialogue a partir de la escucha activa y el reconocimiento del otro, buscando soluciones pacíficas a los conflictos y fomentando su desarrollo autónomo.
En cuanto a la promoción de la equidad y la inclusión, el grupo de universidades públicas plantea como un pilar de la alianza el trabajo por la erradicación de cualquier tipo de violencia, segregación o discriminación por sexo, género, raza, orientación sexual, condición socioeconómica.
El acuerdo resalta como punto cuatro el trabajo mancomunado frente a cómo el conocimiento de alta calidad que se genera en las aulas y centros de pensamiento, puede ser de gran utilidad como respaldo en la construcción de políticas públicas. Precisamente, el quinto campo de actuación de la alianza se orienta a la política de Estado para la educación superior, frente a la cual las cuatro universidades se proponen promover la reforma de los artículos 86 y 87 de la Ley 30 de 1992, en pro de una educación superior pública autónoma, de alta calidad, bien financiada y que reconozca la complejidad.
Los rectores de las cuatro instituciones advirtieron que la alianza inicialmente pactada por ellos, estará también abierta para que otras instituciones de educación superior sumen sus capacidades.