Durante la presente semana los 50 estudiantes de último año que matricularon Consultorio Jurídico III del programa de Derecho, adscrito a la Escuela de Derecho y Ciencia Política de la Universidad Industrial de Santander, reciben la información necesaria para conocer el funcionamiento y el marco legal de la práctica de Consultorio Jurídico y Centro de Conciliación.
Esta práctica, que acercará los estudiantes a los beneficiarios de los servicios del consultorio, estará acompañada por los 29 asesores en las diferentes áreas del derecho y permitirá que los futuros abogados sean los artífices de transformar las realidades sociales de personas de bajos recursos y en condición de vulnerabilidad de la ciudad de Bucaramanga y su área metropolitana.
«Esta es la inducción a nuestros estudiantes de último año que aplicarán el conocimiento, con algo importante que es el impacto a la comunidad, un servicio jurídico social gratuito que se presta a toda la comunidad; es un día especial para la Escuela y para esta dirección de Consultorio Jurídico porque estamos recibiendo un grupo de estudiantes que viene con las más altas calidades académicas, con el compromiso social de cara a prestar su servicio y a transformar las realidades sociales a que todas esas personas que no cuentan con los medios y recursos económicos para acudir a un abogado, puedan contar con toda la estructura y con todo ese talento humano. Y que por supuesto nuestros estudiantes, acompañados por los asesores con las más altas calidades en las diferentes áreas del derecho, prestan en todo lo que corresponde en tema jurídico, en asesoría y representación legal», manifestó la doctora Clara Inés Tapias Padilla, directora del Consultorio Jurídico y Centro de Conciliación UIS.
Este grupo de estudiantes verá reflejada en su práctica de consultorio la puesta en marcha de la reforma al reglamento de Consultorio Jurídico en la que se viene trabajando desde la Escuela y que busca «adaptarse a los nuevos aires que se respiran, no solamente desde el punto de vista legislativo, sino también frente a las nuevas realidades como, por ejemplo, la virtualización de la justicia, queremos estar más a tono con los requerimientos y necesidades sociales.
Por ejemplo, el reglamento busca generar espacios de una mayor discusión y de un mayor ejercicio democrático donde participen los estudiantes de manera directa, de tal forma que se va a contar con un grupo asesor que va a acompañar las decisiones de la dirección de consultorio y también va a cumplir funciones de mediación de conflicto. También va a tocar temas de género, en el cual van a tener participación los estudiantes de Consultorio Jurídico III y IV; esta reforma también busca potencializar más el trabajo alternativo del consultorio; por ejemplo, el trabajo por áreas como el área que aborda el tema de género, migrantes, personas en condición de discapacidad, litigio estratégico, entre otros.
Estas áreas y estas transversalidades, como se acostumbran a llamar, son importantes porque apuntan a una nueva mirada del ejercicio profesional, el abogado ya no es el mismo, es diferente, el abogado de hoy ya no es el abogado que tenía una oficina, una secretaria, una biblioteca y que atendía casos; esa visión tradicional del abogado cambió, hoy el abogado es quien trabaja en equipo, está relacionado con temas de plataformas digitales, se ofrece en red, que incluso obedece a unos lineamientos y a unas posturas éticas diferentes a las del abogado tradicional, es un abogado que en muchos casos sus sitios de trabajos serán las plataformas más que el lugar físico. Para ese abogado necesitamos nuevas formas de abordar la práctica y el ejercicio de consultorio jurídico y, por supuesto, la enseñanza del derecho en general. Esos son algunos aspectos con los cuales queremos apuntar a cambiar o mejorar para estar mejor acompasados a los nuevos tiempos, eso es lo que buscamos y ese reglamento apunta a potencializar más el compromiso social de los estudiantes, por eso una parte importante es la móvil que queremos sacar a los barrios y municipios, pueblos cercanos del área metropolitana, es otro aspecto que queremos aterrizar con la reforma del reglamento», afirmó el doctor Javier Alejandro Acevedo, director de la Escuela de Derecho y Ciencia Política.
Las expectativas de asesores y estudiantes
«Muchas son las expectativas porque tenemos un consultorio que se ha robustecido, con nuevos profesores, los que veníamos apoyando con otros, con visiones del derecho que hoy la sociedad nos exige, ir más allá de lo tradicional, estamos propendiendo por un consultorio que sea inclusivo, que de verdad dé respuesta a las necesidades de nuestra sociedad, entorno, zona de influencia; queremos preparar personas que son nuestros estudiantes con valores, sentido y compromiso social, y mucho amor en esta tarea que es bastante dura. Somos el puente a la justicia, el canal que permite que muchas personas que no tienen las condiciones económicas y están pasando situaciones muy diversas en sus vidas nosotros podamos traerles esa posibilidad de acceder a una respuesta del Estado, lo institucional, que es la justicia. Estamos en una nueva situación que llamo pos pandemia que ha cambiado las relaciones con todo, las relaciones de familia y nosotros debemos responder a esos cambios, debemos estar a tono con los cambios, entregar los profesionales solidarios con valores, ética, compromiso y amor por lo que hacen», dijo Alba Lucía Sepúlveda León, asesora en el área de público.
Estafanía Barbery Lamos, estudiante de Derecho de IX semestre, expresó: «Son muchas las expectativas porque desde el inicio de la carrera en la universidad pública nos han inculcado el servicio a la comunidad y por mi parte estoy muy emocionada de llegar a materializar lo aprendido durante estos años, lo que más me llama la atención de lo mencionado por el doctor Javier y la doctora Clara es el servicio a la comunidad que vamos a dar y espero que todos podamos dar lo mejor de nosotros para de verdad hacer un aporte».
Por su parte, Danna Estupiñán, practicante del consultorio, manifestó que como expectativas tiene «inicialmente poner en práctica todo lo aprendido que en realidad uno siente que es una necesidad en el aula y siempre se pregunta cómo llevarlo a la práctica; en ese sentido las expectativas son muy altas y también es una forma de devolverle a la comunidad que aporta sus impuestos, es devolver la oportunidad que nos han dado de estudiar en la institución pública y también es un todo de juntar, unir lo que se sabe con las ganas de ayudar y que creo que tenemos muchos a la hora de iniciar a estudiar derecho».
