Icono de atajos

Con éxito se clausuró el Diplomado en Salud Mental para profesores y tutores en la UIS

Grupo de profesores, tutores y administrativos que asistieron al cierre del Diplomado.

Con la satisfacción del deber cumplido se realizó la clausura del Diplomado en Salud Mental para profesores(as) planta, cátedra, ocasionales y tutores de la Universidad Industrial de Santander. Un evento enmarcado en el Plan de Acción de la Política de Salud Mental de la Universidad, aprobada en diciembre de 2022.

Se trató de un diplomado de 120 horas, dividido en 3 módulos de 40 horas cada uno, de tal manera que los integrantes de la comunidad pudieran tomar el módulo de su interés, o bien, los 3 módulos, y en todos los casos se les certificó el trabajo. En los módulos participaron alrededor de 35 personas, pero al final quienes completaron todo el ciclo fueron unas 23 personas.

La capacitación estuvo organizada por el Comité de Salud Mental, en cabeza, por una parte, del doctor Jorge Niño, coordinador del Departamento de Salud Mental; Bienestar Estudiantil en la parte de salud, y la División de Gestión de Talento Humano. Y también, los invitados permanentes, que son la decana de Salud y la decana de Ciencias Humanas. El objetivo incluyó preparar al docente a reconocer la importancia de la salud mental, fortalecer sus capacidades para identificar signos y ejecutar acciones de promoción del bienestar y rutas de atención.

“El diplomado en salud mental era una idea que yo tenía desde la Facultad de Ciencias Humanas antes de que empezara el trabajo del Comité de Salud Mental, pero una vez se aprobó la política y empezó a operar el Comité, lo propuse dentro del contexto del trabajo que se está haciendo en el Comité de Salud Mental”, comentó la profesora Ana Cecilia Ojeda Avellaneda, decana de la Facultad de Ciencias Humanas.

“La experiencia fue muy exitosa, porque los profesores, que en un primer momento tenían un poco de reticencia porque pensaban que los íbamos a formar para que atendieran a los muchachos, se dieron cuenta de que esa no era la razón de ser del diplomado, que esta era primero reflexionar sobre nuestra propia salud mental como docentes, como profesores, y aprender hasta dónde nosotros podemos, en nuestras aulas o en nuestra relación con los estudiantes, ayudar o atender a un estudiante y qué no debemos hacer y qué no nos corresponde hacer. Es como ir poniendo unos límites a las funciones de cada uno de nosotros y al cuidado que debemos tener como comunidad académica”, dijo la profesora Ana Cecilia Ojeda.

“La idea es empezar a crear un espacio un poco más académico y amplio de reflexión sobre la salud mental, no solamente la salud mental de los estudiantes, que nos preocupa mucho, sino también la salud mental de nosotros como profesores o como administrativos, de toda la comunidad universitaria; por eso la convocatoria la hicimos amplia”, aclaró la decana de Ciencias Humanas.

Y explicó que, “la idea es entender qué es la salud mental, entender cuál es el límite entre una enfermedad psiquiátrica y qué significa la salud mental, que es fundamentalmente un cuidado de nuestras emociones, un cuidado de nuestro mundo interior, de nuestro mundo psicológico, pero hablar de salud mental no es hablar de enfermedad mental”.