Como resultado de diferentes estudios químicos sobre aceites esenciales provenientes de las plantas aromáticas y medicinales propias de la biodiversidad colombiana, el Centro Nacional de Investigaciones para la Agroindustrialización de Especies Vegetales Aromáticas y Medicinas Tropicales (CENIVAM) de la Universidad Industrial de Santander (UIS), ha puesto a disposición de la sociedad colombiana diferentes productos naturales para la industria cosmética y farmacéutica. Uno de esos es precisamente el ambientador repelente de insectos, producto patentando por la Universidad Industrial de Santander ante la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC).
Este innovador producto repelente de insectos, 100% natural, contiene una combinación especial de aceites esenciales propios de la biodiversidad colombiana, como la naranja (Citrus sinensis), ylang-ylang (Cananga odorata), limoncillo (Cymbopogon citratus), pachulí (Pogostemon cablin), eucalipto (Eucalyptus sp.), palmarrosa (C. martinii) y la citronela (C. nardus).
Este repelente presenta características organolépticas que además de repeler los insectos, ambientan, perfuman y enmascaran malos olores. El producto puede ser utilizado para combatir vectores transmisores de enfermedades graves propias de regiones tropicales, como el dengue, chikunguña, zika y la fiebre amarilla.
Según la Dra. Elena Stashenko, profesora de la Escuela de Química, directora del CENIVAM, se trata de un “producto natural aislado de plantas cultivadas en la región santandereana. Toda la cadena de producción, que va desde el cultivo hasta la destilación del aceite esencial para llegar al producto final, se desarrolla en Santander para el beneficio de los colombianos. Es un orgullo para la UIS y para Santander tener un producto patentado que resulta del conocimiento y el trabajo con cultivadores de la región”.
A diferencia de los repelentes que existen en el mercado, este producto no contiene moléculas de origen sintético que pueden afectar la salud de las personas. “Es un producto que proviene de plantas que por sí solas desarrollan sustancias naturales y no nocivas para protegerse de los insectos. Nosotros destilamos los aceites esenciales de esas plantas y ponemos a disposición un producto que beneficiará a muchas personas”, agregó la doctora Elena Stashenko.
El proceso de diseño de este producto en el que participaron profesores y estudiantes de la UIS, cultivadores y productores de la región, fue liderado por los profesores e investigadores Elena Stashenko y Jairo René Martínez Morales, de la Escuela de Química, y los químicos Deisy Corina Bernal Bello y Diego Camilo Durán García.
Este repelente natural ha sido la base para el desarrollo de uno de los 18 bioproductos obtenidos durante el desarrollo del programa Bio-Reto XXI 15:50, tras seleccionar más de 50 especies vegetales de la biodiversidad nacional. Este programa fue liderado por la UIS y el Centro de Investigación para la Agroindustrialización de Especies Vegetales Aromáticas y Medicinales Tropicales (CENIVAM), para encontrar soluciones a los retos que la bioeconomía trae al crecimiento de Colombia y ofrecer nuevas posibilidades para cultivadores del campo, para la ciencia y para la industria sostenible.