Con el objetivo de aprovechar la alta radiación solar, almacenarla y convertirla en calor para producir agua caliente y calefacción en una vivienda, utilizando residuos locales de la industria agrícola y reducir las emisiones de CO2, se instaló en Berlín, municipio de Tona (Santander), la Estación experimental de conversión de radiación solar en energía térmica para la transición energética en zonas de alta montaña.
Este proyecto se logra gracias a una alianza estratégica entre la UIS y la Universidad de Northumbria del Reino Unido. La prueba piloto se realiza en el Páramo de Santurbán donde, durante un año, se realizará la recolección de datos para así determinar si a futuro se pueden diseñar sistemas más grandes para suministro de agua en caseríos, en conjuntos de vivienda o en aplicaciones agroindustriales y comerciales.
De acuerdo con el profesor e investigador UIS, Viatcheslav Kafarov, este proyecto es de gran importancia porque cumple con varios objetivos de desarrollo sostenible; además, está apoyado con industria nacional, que será generador de empleo.
“El proyecto permitirá generar bastante agua caliente en zonas de alta montaña, aplicando un nuevo sistema, basado en aplicación de materiales, tendremos una casa tendremos absolutamente renovable y sostenible”, aclaró Kafarov.
El proyecto fue financiado por The Royal Society, de Reino Unido, la sociedad científica más antigua y prestigiosa del mundo y contó con el liderazgo del profesor Dr. Khamid Mahkamov, de Northumbria University at Newcastle, líder del proyecto y el profesor Dr. Viatcheslav Kafarov, director del Centro de investigación para el desarrollo sostenible en industria y energía, de la UIS.
Víctor Alexis Lizcano González, estudiante de doctorado vinculado al proyecto, asegura que el desarrollo del proyecto lleva dos años, la etapa se basó en el diseño, el cual tardó aproximadamente un año y otro en construcción e instalación.
“Algo que gustó bastante a los socios ingleses es que en zonas cercanas se pueden encontrar diferentes pisos térmicos, lo que permite poner el sistema a prueba, bajo diferentes condiciones”, dice Lizcano González.
El sistema cuenta con colectores de doble tubo al vacío, que reciben la radiación solar y calientan unos tubos internos, que posteriormente calientan agua a través de los colectores y esta agua se lleva a un tanque de almacenamiento de calor.
El profesor e investigador UIS, Viatcheslav Kafarov, líder del proyecto.