Como la sustentación más exitosa de un proyecto de grado de Licenciatura en Música, catalogó el director de la Escuela de Artes UIS, maestro Jhon Eduard Ciro Gómez, la tarea desarrollada por el estudiante del programa de pregrado, dragoneante Fabián Orlando Londoño Villamizar.
Familiares, compañeros de estudio, profesores y directivas académicas, así como funcionarios y directivos del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, INPEC, acompañados por la Defensoría del Pueblo, se dieron cita en el Salón Santander de la Sede UIS Bucarica para conocer en detalle el trabajo de grado: «Resocialización mediante estrategias pedagógico-musicales que contribuyan con la reinserción social de los privados de la libertad de la cárcel y penitenciaría de media seguridad de Bucaramanga».
En detalle, el estudiante UIS explicó la forma como se concibió y desarrolló el proyecto materializado en la creación de «La Orquesta 36”, agrupación musical compuesta por internos de dicho centro carcelario al indicar que «es un proceso dispendioso, que no es nada fácil, pero afortunadamente he encontrado en el camino personas maravillosas que han contribuido con el desarrollo de esta propuesta pedagógica».
Sobre el impacto destacó: «Lo mejor de este proyecto es que ellos pueden tener una transformación, de pensar en el cambio, en la reinserción y de tener posibilidades de vida sujetas en la música después de que recobren su libertad».
Por su parte el director de la Escuela de Artes UIS manifestó: «Es increíble ver el fruto final de nuestros futuros egresados y verlos pensar en este tipo de proyectos; ahí es donde la universidad se debe, también en nuestra misión y visión, porque todo el tiempo lo estamos profesando, pero también lo estamos haciendo, es esa responsabilidad social lo que a nosotros nos compete».
Agregó el maestro Jhon Eduard Ciro que «impacta saber que lo estamos haciendo bien y que vamos por buen camino al ver cómo unimos el conocimiento, la experiencia y todo lo aprendido en un aula de clase a la vida real y a la transformación social. Ver hoy aquel estudiante que conocí en primer semestre ya hoy, en su sustentación final y a los internos, personas que la única esperanza que tienen es ese instrumento y que gracias a dedicar su tiempo a la interpretación permitió unirlos con sus familias por un momento. Es algo que conmueve el corazón y saber que lo estamos haciendo desde nuestra Escuela, desde la Universidad Industrial de Santander; por eso esperamos que proyectos como estos y muchos más los sigamos realizando».
Finalmente, el dragoneante Londoño Villamizar precisó: «Esto es un peldaño que avanzo en mi proceso de formación porque este propósito que tengo no es solamente el de alcanzar mi Licenciatura en Música, sino continuar con una maestría pedagógica para poder llevar todo este tipo de esquema, de propuestas pedagógicas a los centros de reclusión del país».